El pasado 19 de enero Christopher Tolkien, acompañado de su esposa Baillie, visitaron la Abadía de Thoronet en Francia para ver en primera persona los tapices que la Cité de la Tapisserie Aubusson ya ha elaborado inspirados en la obra pictórica de J.R.R. Tolkien. Se publicó un conjunto de fotos, que ya compartimos en nuestras redes sociales, pero Aubusson aún tenía reservada una sorpresa respecto a esa visita.
Ayer 7 de febrero publicaron en su canal de youtube un vídeo en el que se filma la visita de Christopher y Baillie Tolkien a la exposición. En la declaración de Christopher Tolkien se esconde una bellísima anécdota que nos habla de la emotividad y el cariño que profesaba por su padre, incansable trabajador y artista incombustible. Os compartimos el vídeo, y podéis encontrar al pie una traducción de las palabras de Christopher Tolkien.
«Me gustaría contar que mi padre normalmente trabajaba hasta muy muy tarde por la noche, debido a su proceso de escritura y pintura. Y, cuando yo era muy muy pequeño, muy muy muy pequeño, por la noche, solía preocuparme por mi padre… ¿aún estaba vivo?
Una noche, cuando la casa estaba en silencio, bajé las escaleras para ver si encontraba a mi padre. Y allí estaba. Me sentí tan aliviado que (pobre tonto de mí) me eché a llorar. Una de las lágrimas, especialmente grande, cayó en la pintura… ¡imagínenlo! Pero mi padre no se enfadó para nada. Lo que hizo fue tomar su pequeño pincel y fue eliminando todo rastro de la lágrima. También tuvo que cambiar las hojas del árbol un poco, pues la lágrima había caído sobre el precioso árbol que se ve en primer plano.
El título de la pintura es Rivendel. Y en ese hogar Frodo pronuncia las palabras fundamentales para El señor de los anillos: ‘Yo llevaré el anillo, aunque no sé cómo’.
Gracias».